MI EXPERIENCIA CON LA ECOGRAFÍA 4D
Con la llegada de la ecografía 4D las futuras embarazadas pueden descubrir tempranamente si el feto presenta deformaciones o irregularidades, logrando mayor confianza y tranquilidad para abordar las diferentes etapas del embarazo.
Este tipo de ecografías se recomienda realizarlas entre la semana 24 y la semana 30 del embarazo, ya que es el momento perfecto donde el bebé se encuentra bastante desarrollado y su tamaño no es tan grande por lo que puede moverse libremente y poder observar detalladamente su rostro y cuerpo.


Mi experiencia con la ecografía 4D ha aportado una hermosa conexión con mi bebé en comparación con la ecografía convencional. En mis dos embarazos pude observar de modo más global las expresiones de mi bebé y diversos movimientos fetales como la flexión de su cabeza y estiramiento de sus brazos y piernas.
En mi segunda experiencia, el hecho de poder ver con perfecta nitidez las facciones de mi futura hija disminuyó los temores y ansiedad que he tenido durante mi embarazo debido a las complicaciones con mi primera hija.
Al comienzo, la bebé estaba de espaldas y no había manera de que se viera, sus piernas las podía sentir en la parte superior de mi abdomen y sus movimientos eran más rápidos, lo que impedía que la pudiéramos observar detalladamente.
El doctor, empezó a tocarla y moverla lo que hizo que se girara varias veces, pero mi pequeña Celeste no se dignaba a enseñar su carita, ella consideraba que era mejor que le viéramos su colita. Cuando ya creíamos que iba a ser imposible, mi bebé se giró y comenzó a realizar pequeños movimientos en su rostro.
No puedo describir lo que sentimos en ese momento. Era la primera vez que veíamos la carita de nuestra bebé tan detalladamente, su rostro nos permitió hacernos una idea de cómo será nuestra pequeña por lo que fue una experiencia inolvidable.
Con mi primera hija nos regalaron un pequeño álbum con 4 imágenes y un video en formato CD, pero debido a que actualmente estamos en pandemia los médicos tienen prohibido la entrega de estos obsequios, por lo que solo pudo quedar la evidencia en el celular y 6 fotos que fueron enviadas a nuestros correos.
Para las que son futuras madres, tener la oportunidad de realizarse este tipo de ecografía es la mejor inversión y experiencia que se puede tener. Es algo que no podemos pasar desapercibido cuando estamos embarazadas, aunque solo sea una vez. Porque ¿Quién sabe si se repetirá otra vez…?
Escrito por: Maria del Pilar Betancur Cardona.